Los argentinos se volcaron en masa a la compra de televisores. Es así como se espera este año ventas por un total de 2,6 millones de aparatos, de diferentes tecnologías. Sin embargo, la aparición de un nuevo sistema hace temer sobre si el modelo elegido pasará, en poco tiempo, a ser parte del pasado
“¿Y ahora qué hago con mi televisor LCD?” Esta pregunta fue realizada en estos días por algunos compradores de los más de un millón de televisores de cristal líquido que se vendieron este año, luego de leer en los diarios de este fin de semana múltiples ofertas de otra tecnología llamada LED.
La inquietud no es menor, si se tiene en cuenta que este año se van a vender 2,6 millones de televisores de todos los sistemas en el mercado argentino, el doble que en 2009, según coinciden en afirmar la mayoría de los fabricantes, quienes también están de acuerdo en señalar cuáles son las causas de este boom:
• El recambio tecnológico.
• La Copa del Mundo de fútbol.
• Los planes de 50 cuotas.
Hasta fin de año, se estima que se venderán 1,2 millón de televisores de LCD y LED, frente a los 430.000 de 2009.
Para responder a la pregunta, y saber si el poseedor de un LCD puede sentirse defraudado, conviene primero repasar y comparar las diferentes tecnologías que hay en el mercado.
DiferenciasHace unos años, la principal tecnología televisiva, por fuera de los tradicionales y antiguos equipos de tubo, era el plasma, un tipo de pantalla plana habitualmente usada para grandes televisores, de 37 o más pulgadas.
¿Qué es el plasma? Un sistema de muchas celdas diminutas situadas entre dos paneles de cristal que contienen una mezcla de gases (neón y xenón). Ese gas es el que, en forma eléctrica, finalmente se convierte en una sustancia fosforescente (que no es fósforo) que emite luz.
Posteriormente al “viejo” plasma le salió un competidor muy fuerte: el LCD.
¿Qué es el LCD (Liquid Crystal Display)? Es una pantalla delgada y plana formada por un número de píxeles a color (monocromos) colocados delante de una fuente de luz o reflectora.
A diferencia de los plasmas, los LCD:
• Cuentan con una amplia disponibilidad de tamaños, desde 15 a 100 pulgadas. • El ángulo de visión es igual o superior.
• Posee una mayor resolución.
• Consumen menos energía.
• Su tiempo de vida es mayor
• Es más ecológico, pues no usa mercurio.
No obstante, el plasma sigue siendo más económico en tamaños superiores a 50 pulgadas.
Y mientras se disputaba esta batalla entre plasmas y LCD, un nuevo rival se sumó a la contienda: los LED que, apoyados en una nueva tecnología, irrumpieron en el mercado para reemplazar a las lámparas de cristal líquido, característica de los LCD.
¿Cómo funcionan los LED? Dividen la pantalla en 128 segmentos. Esto posibilita:
• Mejorar los negros y el contraste, al poder los mismos ser apagados y encendidos en forma independiente.
• Ofrecer mayor brillo a la imagen.
• Brindar un consumo más bajo de energía.
Frente a frenteLa diferencia principal entre el LCD y el LED es su tipo de iluminación.
Esto es así dado que, en los primeros se utilizan lámparas fluorescentes. En los segundos, diodos emisores de luz.
Estos diodos son capaces de apagarse en las zonas donde no son necesarios, consiguiendo así perfilar con mayor precisión los colores de la pantalla.
La retroiluminación LED contribuye a lograr un índice de contraste dinámico, capaz de ofrecer negros más realistas y matices de grises más sutiles.
Esta nueva tecnología cuenta con estas configuraciones principales:
• La iluminación se encuentra en los bordes de los equipos, lo que permite reducir el grosor del televisor.
• El sistema se puede apagar y encender en zonas específicas, consiguiendo así mejores contrastes.
• En cuanto al tema de reproducción de video rápido no existe ninguna diferencia en el desempeño de ambas tecnologías.
Además de las diferencias descriptas, existe una ventaja importante a favor de los LED: soportan el formato 3D (leer más sobre esto más adelante en esta nota).
Precios y opciones LED que ofrece el mercadoVarias marcas fabrican LED para el mercado local: Sony, Philips, Samsung, LG, BGH e Hitachi.
Por ejemplo, Philips tiene el PFL5605/77 FULLHD de 40” con sintonizador digital incorporado compatible con el sistema argentino. Su valor es de $6.999. También hay otro modelo, pero de 32” a $4.999. Ambos son de fabricación nacional.
Samsung dispone de un equipo, el UN40C5000 DF, de 40'' con conexión USB y HDMI. Su valor es de $8.999. También ofrece el de 46” a $9.999.
Sony lanzó el EX605 de 46” con retroiluminación LED Full HD 1080p de la línea Bravia con Cinema Mode. Su valor asciende a $10.999. El origen es brasileño.
LG va más allá y con el SL90 de 47” y apenas 2.9 cm de grosor promete imágenes más reales. Su precio llega a los $13.999.
Antes de comprarSi usted decidió comprar un televisor en estas próximas fiestas, o evalúa reemplazar su LCD o plasma por un LED, puede que le resulte conveniente tener presente los siguientes consejos.
1. Los LED dejaron de tener precios astronómicos, si bien siguen siendo la opción más cara: Por ejemplo, un LED TV de 32” Philips cuesta $5.999, mientras que un LCD del mismo tamaño de pantalla y de la misma marca está en 3.999 pesos.
Pero además, las características de los equipos se ampliaron.
Muchos modelos hoy se conectan a redes y vienen con software incorporado, que permite acceso fácil a sitios populares de Internet.
En este sentido, la capacidad para reproducir fotos, música y video creció a pasos acelerados. Estos desarrollos se encuentran presentes en los LED y en algunos modelos de LCD.
2. No considere el tamaño o el grosor de la pantalla, porque ya son comunes a las tres tecnologías.
En cambio, el costo del consumo de energía es una variable a tener presente: los de cristal líquido utilizan menos energía que las pantallas de plasma, pero los LED son aún más eficientes.
3. Una prueba interesante para hacer es la siguiente: vaya al local de ventas con un video de alta definición grabado en un Blu-Ray o en una unidad de memoria (pendrive). Solicite al vendedor que se lo reproduzca en diferentes aparatos para apreciar las diferencias.
Considere que la prueba se haga en el modo hogar, que suele ser más oscuro que el de presentación que predomina en los negocios.
4. Un detalle para observar cuando compare equipos son las imágenes con movimiento. Por ejemplo, si hay sombras o si salen borrosos los detalles. Se trata de problemas comunes en modelos viejos de LCD o en los primeros LED.
5. Otra prueba consiste en observar los tonos de la piel que reproduce la pantalla. Si prefiere colores nítidos, mire si las personas que aparecen bronceadas por el sol. En caso de comprobarse esto, se trata de colores sobresaturados.
6. Deseche las pruebas con dibujos animados, porque siempre lucen excelentes, en casi todas las pantallas planas. Opte por películas o programas de TV de acción.
7. Otra variable para considerar es el lugar donde irá el equipo: en departamentos y casas chicas se aprovechan mejor tamaños de entre 26" y 32". Para espacios grandes, 32" o superior.
8. Si se van a ver imágenes en alta definición (satélite, TV por cable digital, Blu-Ray, juegos en alta definición), el televisor debe tener como mínimo 720p de líneas de resolución y por lo menos con una entrada de HDMI.
9. Si el bolsillo lo permite, apunte a un contraste dinámico mayor a 5.000:1, a dos ó más conexiones HDMI, y a una lateral de video compuesto y componente.
10. En cambio, si el televisor será para usar con TV cable común no digital o DVD necesita como mínimo dos entradas de video compuesto.
El mercado aun es muy incipiente y apenas equivale al 1% del total de ventas previstas para este año.
El mercado aun es muy incipiente y apenas equivale al 1% del total de ventas previstas para este año.
Los fabricantes apuntan con estos equipos a los amantes de las novedades tecnológicas, del segmento ABC1 de la sociedad, que son los que pueden animarse a gastar unos $15.000 que cuestan los 3D más baratos.
Tratan de aprovechar el furor de la audiencia que va a los cines por el formato tridimensional, para llevar agua a su molino.
Al igual que en estos lugares, en los televisores 3D se pueden apreciar imágenes que parecen salir de la pantalla. Por supuesto, se deben usar anteojos especiales.
Pero los nuevos equipos soportan algo más que las tres dimensiones.
Por ejemplo, se los pueden conectar a Internet vía cable módem, ADSL o Wi-Fi y navegar por la Web o instalar aplicaciones.
Además, a través de la red inalámbrica (o de un nuevo estándar, DLNA), en estos aparatos se pueden concentrar el contenido de audio y video que se disfruta en otros equipos del hogar, como una computadora o un aparato de audio.
Pero, uno de los inhibidores para un fuerte crecimiento del formato 3D en el hogar es la escasez de contenido apropiado.
Es que sólo se pueden ver en forma tridimensional algunas películas que ya estén grabadas en Blu-Ray 3D (un tipo especial de Blu-ray), que posibilita ser leído únicamente por un reproductor especial.
Y, además, hay que comprar las películas, ya que no están en alquiler.
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